Las líneas sutiles de Herbariae se inspiraron en cinco flores: la amapola, el narciso, el loto, la dalia y el cardo. Elegidos por el poder de su evocadora pero delicada belleza, adornan cada pieza de esta colección. Dibujadas al estilo de los antiguos herbarios y obras botánicas, dentro de márgenes estilizados bordeados por una línea negra, las imágenes destacan en su contraste en blanco y negro, y en su núcleo de colores más suaves -rosa, amarillo, verde y azul pavo real-, que evocan pinturas a la acuarela.